La música siempre acompaña en un cumpleaños. En Ballesol Granada la preferida es la de la tuna, “por historia, recuerdos y buena letra”, dicen los residentes.
De esta manera celebraron el último cumpleaños de uno ellos, rodeado de tunos, familiares y amigos. “Aquí sumar años a la vida es un placer, aunque tengas que soplar muchas velas”, confesaba uno de los residentes que asistió al cumpleaños. Las felicitaciones y los buenos deseos pusieron el epílogo a esta entrañable celebración tan bien recibida en Ballesol Granada.