La participación y solidaridad de residentes y trabajadores de Ballesol Azalea ha sido fundamental para alcanzar un sueño: Ayudar a Esther, una niña con parálisis cerebral a la que se quiera apoyar para que pueda alcanzar una calidad de vida deseable.
La aportación de dinero conseguido de diferentes actividades y proyectos en la residencia ha sido un estímulo para la familia de esta niña. La participación también está presente en más actos que se celebran en la residencia de Ballesol Azalea.
La fiesta pirata es un ejemplo. Con la colaboración de las comparsas “El dueño del mal” y “el reino de las alegrías”, residentes y profesionales de la residencia se disfrazaron de divertidos piratas.
