En la residencia de Ballesol Poio no hay tiempo para aburrirse, y menos cuando llegan las fiestas de San Salvador. En ese momento los sentimientos se comparten con las alegrías y las visitas de familiares y amigos, que disfrutan de un programa de fiestas que en la residencia de Ballesol satisface los gustos y las tradiciones de muchos de los residentes.
Entre los actos más esperados, la llegada de la banda municipal de Meaño y los bailes regionales complació a los presentes “por la emoción y cercanía que transmite”.