Los residentes de Ballesol Patacona dedicaron muchos días a cuidar todos los detalles para que la celebración de los carnavales fuese un éxito. Las mesas estaban repletas de máscaras de colores de donde escoger las más clásicas o modernas. “Es una maravilla comprobar cómo la creatividad no sabe de años sino de ilusión”, reconocía uno de los invitados a la gala de carnaval a la que no falto el “Rincón poético de Manises”, que animó con música y alegría, un acontecimiento que empezó a tener sentido en el espacio de arte que muchos días ocupan en los talleres de manualidades.