INAUGURACIÓN DEL SERVICIO DE REHABILITACIÓN NEUROLÓGICA Y CARDÍACA EN BALLESOL COSTA BLANCA SENIOR RESORT.
Durante los días 1 y 2 de marzo se inauguró en las instalaciones de Ballesol Costa Blanca Senior Resort un innovador Servicio de Rehabilitación Neurológica y Cardiaca dirigido a pacientes que han presentado patologías cerebrovasculares o cardiovasculares.
“Iniciativas como esta son muy útiles para tratar de revertir el envejecimiento por causa de las enfermedades cerebrovasculares”. Quien lo afirma es el bioquímico y científico Juan Carlos Izpisúa, Doctor Honoris Causa UCAM y Profesor de Investigación en la cátedra de Roger Guillemin en el Instituto Salk de Estudios Biológicos en la Jolla, California (EEUU) considerado por investigadores, doctores o catedráticos como un futuro Premio Nobel por su trabajo en la medicina regenerativa. Su presencia y participación en esta inauguración junto a la del Consejero Delegado de Ballesol, Ignacio Vivas, el Neuropsicólogo y Director General del Centro de Rehabilitación Neurológica Fivan, Javier Chirivella, y el director del Instituto Ircana (Instituto de rehabilitación Neurológica y Cardiaca de Alicante), el doctor Juan José Muñoz, y personalidades del ámbito médico, social y político de la Comunidad Valenciana, puso en valor el acuerdo alcanzado entre Ballesol y el Instituto Ircana con el apoyo de los profesionales de Nutricia para que “este Servicio de Rehabilitación Neurológica y Cardiaca pueda aumentar la calidad de vida de los pacientes con patologías cerebrales y cardíacas”. Para conseguirlo se contará con un equipo médico multidisciplinar que atenderá de forma integral y personalizada a estas personas para “que su rehabilitación sea lo más precoz posible con el respaldo y valoración de las especialistas necesarios: cardiólogos, neurólogos, fisioterapeutas, psicólogos, etc.”, se adelantó durante la presentación de un programa de rehabilitación que tiene inicialmente una duración por paciente de tres meses. Terminado el proceso en la residencia Ballesol Costa Blanca Senior Resort, es de “vital importancia la reeducación nutricional y de hábitos saludables para paliar los factores de riesgo del paciente”.
Sobre la importancia de contar con un Servicio de Rehabilitación Neurológica y Cardiaca de calidad habló el Director de la residencia Ballesol Costa Blanca Senior Resort, Óscar Nombela, convencido de la apuesta por un “envejecimiento activo y de futuro con una mejor calidad de vida”, y que a su vez aúna “dos terapias que enriquezcan y aumenten el plano cardiológico y neurológico de los residentes”. Un deseo que se alcanzará “desde el corazón utilizando la cabeza”, afirmó. Y es que en la actualidad en España sólo existen 112 unidades de rehabilitación cardiaca.
Ballesol tiene en la actualidad 7.000 plazas residenciales y 1.000 plazas más en construcción bajo un concepto de atención integral que consta de muchos servicios, entre ellos el sanitario. A lo largo de los más de treinta y cinco años de experiencia las necesidades de los clientes de Ballesol han ido cambiando conforme lo ha hecho la sociedad. “Actualmente uno de los grandes retos que afronta esta entidad es el constante incremento de la esperanza de vida y su significación en términos de dolencias cardiovasculares y cognitivas. Un reto que precisa de una acción concertada por parte de todos los actores sociales, desde médicos, cuidadores y administraciones públicas”. En este sentido, y como continuó explicando D. Ignacio Vivas, Consejero Delegado de Grupo Ballesol, la inauguración del Servicio de Rehabilitación Neurológica y Cardiaca en la residencia de Ballesol Costa Blanca, posibilitará afianzar la calidad de vida de todos los pacientes y apostar por las terapias más avanzadas en el campo de la neurología y las enfermedades cardiovasculares, asegurando los mejores servicios asistenciales y residenciales para aquellas personas que hayan sufrido un ictus o enfermedades cardiovasculares, y también a sus familias.
El sentido de Ircana va mucho más allá de “cuidar corazones enfermos”. A cada palabra que Juan José Muñoz, doctor y director de esta institución, emplea en explicar una dolencia cardiaca o neurológica añade otra sobre concienciación y sensibilización a la sociedad. “La prevención con actividad física diaria, combatir la obesidad o el sobrepeso, dejar de fumar y las comidas sanas y cardiosaludables”, explica Muñoz, son tan aconsejables como el control de otros factores de riesgo cerebro y cardiovasculares. Como Instituto de Rehabilitación Neurológica y Cardiaca de Alicante es pionero en aplicar el I+D+I para conseguir el máximo grado de rehabilitación del paciente. Un modelo que presentó a los asistentes en esta inauguración y en el que es básico un “protocolo de trabajo para tratar tanto la parte física como la parte psicológica” y la innovación, “porque además de la fisioterapia clásica nos apoyamos en una plataforma que nos permite una recuperación neuronal virtual consiguiendo trabajar con el paciente desde la parte física y cognitiva mediante ejercicios entretenidos y útiles”. Cada año atienden a más pacientes de Ictus, Parkinson y Alzheimer con sintomatología y periodos de evolución muy diferentes, “pero con una evidente mejoría y recuperación de ictus recientes, ya que las secuelas se han restablecido en algunos pacientes en un 60%”.
Los infartos siguen siendo la primera causa de muerte en España. Cada año se producen más de 67.000 infartos de los cuales un 30% fallecen antes de recibir una atención médica. Reconocer la situación cardiológica a tiempo real del paciente es una de las ventajas que transmitió el equipo de Ircana durante la presentación de este servicio. “Hemos trabajado con 12 pacientes infartados que han controlado mediante terapias de apoyo los factores de riesgo cardiovasculares, entre ellos el tabaquismo o el control del sobrepeso…el cambio ha sido espectacular y todos ellos han podido recuperar por completo su situación laboral y confianza”, explicó el doctor Muñoz sobre las posibilidades del novedoso Servicio de Rehabilitación Neurológica y Cardiológica en Ballesol Costa Blanca Senior Resort, y que convierte a Ircana, en referente y modelo en prevención y rehabilitación de personas que hayan sufrido daños cerebrales graves, patologías cardiacas o de aquellos que deseen mejorar su calidad de vida y obtener mayor bienestar.
En 2010 el neuropsicólogo doctor Javier Chirivella dirigió el primer estudio epidemiológico sobre daño cerebral en la Comunidad Valenciana, “algo inédito hasta entonces por la poca información que existía sobre el daño cerebral adquirido en la población adulta”. Los primeros resultados que se obtuvieron apuntaban que sólo entre un 5 y 10% de las personas con daño cerebral adquirido eran rehabilitadas al año, tanto en centros públicos como privados en la Comunidad Valenciana. Un porcentaje que “es posible que haya empeorado”, por eso existe la necesidad urgente de crear estas unidades como las de ictus para reducir la mortalidad y morbilidad de estos pacientes. “Lo que quisimos mostrar con este estudio a la Consejería de Sanidad es que podíamos estar ahorrando entre 500.000 y 1,2 millones de euros por paciente si hiciéramos una rehabilitación multidisciplinar de estas personas”.
Una de las aportaciones del doctor Chirivella durante su ponencia sobre regeneración celular y envejecimiento se centró en la explicación de la superación de dos paradigmas existentes: “nacemos con un número de neuronas que se pierden con el paso del tiempo” y “los genes condicionan nuestra inteligencia”. Paradigmas que cambiaron no hace muchos años para empezar a hablar del concepto de neuroplasticidad: propiedad del sistema nervioso que permite al cerebro cambiar y adaptarse desde el punto de vista funcional e incluso anatómico. Se sabe que el aprendizaje implica el fortalecimiento de las sinapsis cerebrales. En la práctica, explicó Chirivella, “nosotros hemos tratado pacientes en los que han pasado varios años desde un ictus consiguiendo muchos avances. Hace relativamente poco tiempo se postulaba que pasaban seis meses o un año desde ese episodio y ya no se puede hacer casi nada en rehabilitación. Esto no es cierto, porque ese cerebro -que sigue siendo plástico- puede adaptarse, cambiar y crear nuevas conexiones”.
Como referente mundial en la biología del desarrollo molecular y celular, la ponencia del doctor Juan Carlos Izpisúa Belmonte se centró en la Regeneración Celular y el Envejecimiento, como un proceso que se puede revertir desde que asumimos que “venimos con la carga genética de nuestros padres, pero la manera en la que nos comportamos afecta a nuestro genoma y epigenoma, y obviamente nuestra interacción con el ambiente va a tener una importancia fundamental en el envejecimiento”. ¿Es posible entonces revertir el envejecimiento de un tejido que deja de funcionar? Una de las líneas de investigación que este bioquímico y científico lleva a cabo en el Instituto Salk de Estudios Biológicos en la Jolla, California se centra en responder a esta pregunta. Pese a la generosidad de los españoles y haber realizado más de 90.000 trasplantes de órganos, “no hay el suficiente número de células, tejidos y órganos para cubrir la demanda necesaria”. Explicó que, aplican tecnologías de edición génica y células pluripotentes gracias a las cuales han creado ratones que poseen ojos, páncreas o corazón de rata lo que se llama “quimera interespecífica” un organismo formado por células de diferentes especies. Esto en el caso del ratón y de la rata es viable, pero al intentar realizar quimeras interespecíficas para conseguir órganos humanos utilizando cerdo o vaca el resultado no es el mismo. Pese a que en su laboratorio tratan de “generar esos tejidos y órganos ”, hay algo que no funciona: “Ninguna de las células que se ha generado en un laboratorio es realmente funcional, se parece mucho a la que genera el embrión pero no es la misma. En cambio en la naturaleza observamos que se generan todos los órganos y estructuras de un animal de manera perfecta”. Como conclusión de su intervención, el profesor Izpisúa argumentó que “quizás la naturaleza puede hacer lo que nosotros no sabemos desarrollar en el laboratorio, mediante los cambios en el epigenoma. Estamos muy lejos de tener una incidencia real en el paciente desde el laboratorio, pero por ello no tenemos que perder la esperanza porque todo lo que ayer era imposible hoy es posible”. El profesor Izpisúa concluyó con este deseo que orienta su trabajo: “Lo importante es que el tiempo que vivamos lo hagamos con menos enfermedades, con mayor calidad de vida y que nuestros tejidos y órganos respondan de la misma manera que cuando eran jóvenes”.
