La residencia de Ballesol Fabra i Puig celebró el carnaval con el protagonismo de los residentes, que elaboraron los disfraces que después mostraron a familiares y personal del centro residencial. Pelucas, gorros y máscaras lucieron como complementos entre el esplendor de unos residentes que disfrazados de tunos recordaban que “todo lo que se ve es un trabajo realizado por nosotros, desde el diseño hasta las formas”. Entre risas y mucho humor carnavalesco pasó una tarde que mostró la actividad y la participación que diariamente demuestran los residentes… que ya preparan la próxima festividad con la misma originalidad que la tarde de carnaval.