La relación entre la Fundación Protectora de Animales del Principado de Asturias y Ballesol Gijón está llena de cariño, ternura…y muchas caricias. Así se refleja cada visita que realizan a la residencia para desarrollar una terapia de evidentes beneficios para residentes y animales.
Entre los asistentes, los cinco hermanos D (Daney, Danka, Dasja,Davey y Dayna) se han ido ganando las caricias, las palabras y besos de nuestros mayores.
Ha sido un tiempo plácido y reflexivo antes de conocer que todos ellos han sido adoptados por familias holandesas. Antes de la despedida, los residentes de Ballesol Gijón tuvieron un detalle con la Protectora de Animales y sobre todo, con los perros. Días después, la organización holandesa que gestiona estas iniciativas, mandó un vídeo con los cinco perros y las cartas de los residentes de Ballesol Gijón.