95 Cumpleaños de Babil
El 9 de Octubre mi padre cumple 95 años. ¡Quién lo iba a decir hace tres años cuando llegó a Ballesol! Estaba muy delgado pues no quería comer nada y no se podía tener en pie. Pero a la semana ya había recuperado peso y autonomía y podía irse solo a la calle a tomar algún café. Ahora, aunque físicamente se mantiene bien, su cabeza no ha perdonado el paso del tiempo y anda muy desorientado. Mi padre se ha creado un mundo pequeño donde no entra más que él y sus recuerdos. Un mundo cerrado donde los pasillos de la residencia son calles y los ascensores tranvías.
Quiero agradecer a todo el personal de Ballesol por la paciencia que tienen con él, por el humor con el que se toman sus ocurrencias, por la tolerancia y cariño con que le tratan.
También quiero dar las gracias a los familiares y cuidadoras de los residentes, de los que siempre recibe palabras de ánimo, un saludo cariñoso o una sonrisa.
Entre todos habéis logrado que la residencia sea lo más parecido a una gran familia. Yo, siendo su hija, no lo podría hacer menjor. ¡Felicidades papá! Gracias a todos.
Dª. CARMEN ESPARZA