LAS VARICES

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ALGO MÁS QUE UN PROBLEMA ESTÉTICO

Las varices son una enfermedad que afecta a las venas de las piernas. Se calcula que puede afectar entre el 15 o 20% de la población española. En la mayoría de los casos están causadas por diversos factores. El resultado es el de unas venas ensanchadas y dilatadas, lo que provoca sensación de malestar y dolor.

Según explica el Dr. Luis Reparaz, jefe del Servicio de Cirugía Vascular del Hospital Gregorio Marañón (Madrid), esto provoca problemas de circulación sanguínea que pueden ser muy perjudiciales para la salud, además de antiestéticos. “Ahora bien”, advierte este especialista, “no en todos los casos estas complicaciones estéticas terminan por ser un problema de salud”. De hecho, apenas en un 1% de los casos de varices acaban teniendo complicaciones.

Las varices o venas varicosas son venas hinchadas a causa de una acumulación anormal de sangre producida por una debilidad, a menudo heredada, en las paredes de las venas superficiales. Esta debilidad hace que las venas se estiren y se dilaten, de manera que la sangre se acumula fácilmente cuando una persona permanece de pie durante mucho tiempo. Este proceso se da habitualmente en las venas de las piernas y las mujeres son más propensas a padecerlo. Las venas tienen unas válvulas que facilitan el flujo de la sangre hacia el corazón. Cuando estas válvulas no funcionan correctamente, la sangre no fluye y se estanca. Esto a su vez provoca que las venas se dilaten y alarguen convirtiéndose en varices o venas varicosas.

Habitualmente aunque, las varices no causan problemas médicos. En algunas ocasiones, requieren un tratamiento especial para aliviar el dolor. También pueden producir coágulos y otras complicaciones. Algunas personas deciden operarse por motivos estéticos. Otros lo hacen por necesidad.

A diferencia de las venas sanas, las varices adoptan un color que varía entre el azul y el morado oscuro y son bastante visibles. Las varices dan la sensación de estar hinchadas y torcidas. Aunque cualquier vena del cuerpo puede degenerar en una variz, generalmente las venas m ás propensas a verse a fectadas son l as de las piernas y las de los pies, especialmente las de la pantorrilla. Esto se debe a que los factores que más favorecen al desarrollo de las varices son la obesidad, el sedentarismo y estar de pie sin moverse durante períodos prolongados de tiempo. Otro factor determinante para padecer esta enfermedad es la predisposición genética; es decir, cuando un familiar ha padecido de varices, será más factible que familiares directos la padezcan, señala Reparaz.

A pesar de que las piernas o pantorrillas son el lugar más habitual del cuerpo en la que se sufre de varices, también están presentes en otras regiones del cuerpo, como el esófago (varices esofágicas), la región anal (hemorroides) o los testículos (varicocele).

A pesar de que las varices son sobre todo un problema estético, Reparaz señala que los casos más graves pueden acarrear complicaciones como úlceras en la piel que cubre las venas enfermas o la aparición de una trombosis. “Esto se debe a que las varices pueden provocar una acumulación de sangre en las venas y la posterior formación de un coágulo de sangre”

FACTORES PREDISPONENTES

La edad, el sexo femenino, la obesidad y el sedentarismo son algunos factores determinantes en la aparición de las varices. La aparición del síndrome de piernas cansadas “tiene un factor hereditario, aunque hay situaciones que pueden desencadenarlo, como la obesidad, el sedentarismo, el tabaquismo o tener una profesión que obligue a pasar demasiado tiempo de pie”, señala Reparaz. Más del 65% de las personas que aseguran tener síntomas de esta alteración son amas de casa, peluqueros, camareros o recepcionistas, según un estudio realizado por la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular. Las varices afectan al 62% de estos profesionales de “riesgo”.

La mayoría de estos trabajadores pasan más de cinco horas de pie o más de dos sentados. Según los resultados de la encuesta de la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular, realizada entre más de 1.200 personas, un 80% de españoles con síntomas pasa de pie la mayor parte de su jornada laboral. Un 36% de los que permanecen muchas horas en la misma posición nota hinchazón de tobillos y un 86% ve como sus molestias empeoran con el calor. Se calcula que más de 300.000 sufren esta alteración, cuyos síntomas empeoran con la llegada del verano. Según los expertos, el 33% de la población adulta de países industrializados sufre esta afección.

Entre los síntomas más relevantes destacan:

• La propia apariencia estética y el dolor, manifiestado en: venas agrandadas, hinchazón del tobillo, molestias en las piernas, y picores en la parte inferior de la pierna y el tobillo que pueden derivar en rasguños y hemorragias.

• En ocasiones, los síntomas son peores cuando las varices se están desarrollando que cuando ya están formadas. Por otra parte, algunas personas desarrollan complicaciones como dermatitis, flebitis o úlceras.

• Detectar la aparición de varices es una tarea sencilla puesto que éstas se aprecian a simple vista, pero los síntomas pueden aparecer antes de que las varices sean visibles.

• Su médico puede palparle la pierna para determinar la naturaleza del trastorno. Y si de lo que se trata es de evaluar el flujo sanguíneo, algunos médicos optan por realizar radiografías o ecografías dúplex de la extremidad.

TRATAMIENTO

Aunque si bien las varices, mayoritariamente, “no constituyen un problema grave de salud, pueden ser molestas y originar complicaciones si no se toman las medidas adecuadas”, señala el Dr. Luis Reparaz. El tratamiento de las varices está enfocado a aliviar los síntomas y evitar que el trastorno vaya a más, puesto que en principio, no tienen cura. En este sentido, se recomienda al paciente que evite permanecer de pie durante mucho tiempo, (especialmente en el caso de personas con antecedentes familiares del mismo tipo), trate de elevar las piernas cuando descanse o duerma y use calcetines elásticos.

El momento más propicio para iniciar el tratamiento contra las venas varicosas es aquél en el que su dilatación es mínima, en invierno o durante las estaciones más frías, ya que la temperatura ambiental alta favorece su hinchazón. Por este motivo, las distintas cirugías en varices se realizan antes o después del verano.

TECNICAS

Son varias las técnicas que se pueden emplear para tratar las varices: flebectomía, es la técnica estándar y se usa desde hace años. Consiste en extirpar la vena safena, que forma parte del sistema venoso superficial y los paquetes varicosos colaterales. Se realiza en venas de tamaño medio-grande y mediante anestesia general.

El endoláser y la radiofrecuencia endovenosa son dos procesos modernos de tratamiento de las varices tratadas desde dentro. Ambas se aplican con anestesia local, y todas ellas son técnicas rápidas -entre 30 y 45 minutos- y sencillas. La Escleroterapia y Crioesclerosis. Esta técnica está indicada varices de pequeño tamaño y varices residuales después de una cirugía.

LO MÁS NOVEDOSO EN VARICES

La Cura Hemodinámica de la Insuficiencia Venosa Ambulatoria (CHIVA) es una técnica que supone un cambio de enfoque respecto a la cirugía más convencional: su objetivo es conservar las venas varicosas en lugar de extirparlas de forma definitiva para reorganizar el drenaje sanguíneo de los tejidos e intentar restaurar un funcionamiento adecuado. Se efectúa a través de pequeños cortes y con anestesia local. Otra diferencia fundamental es que tras su aplicación -de 30 a 45 minutos-, el paciente no debe hacer reposo, puesto que una vez finalizada sale de la sala andando. Debe caminar durante una hora seguida después de la cirugía y todo lo que pueda los días siguientes con el fin de restaurar la circulación de la pierna intervenida, ya que cuanto más se camina, mejor es su recuperación.

PREVENCIÓN

Para prevenir las varices basta con seguir unos consejos básicos:

1. No engordar o perder peso

2. Evitar el sedentarismo

3. Tumbarse con las piernas elevadas por encima del corazón.

4. Hacer ejercicio físico (natación, etc.)

Además, es aconsejable la adopción de hábitos saludables que van en el sentido de llevar una vida activa y una alimentación adecuada. Por ejemplo, alimentos ricos en vitamina C, como la fruta, aumentan el tono de la pared venosa.

10 Consejos para aliviar las molestias de las varices:

  1. Darse duchas de agua fría y aplicarse crema hidratante después.
  2. Evitar el calor en verano, la exposición prolongada al sol y el uso de cremas solares de protección alta. En la playa conviene caminar y bañarse a menudo.
  3. Evitar permanecer sentados o de pie durante períodos prolongados.
  4. Utilizar calzado ancho y cómodo y evitar el uso de tacones.
  5. Vestirse con prendas amplias, cómodas y ventiladas en lugar de fajas y ropa ajustada.
  6. Elevar los pies sobre el nivel del corazón durante 15-30 minutos varias veces al día para reducir los síntomas de las varices y el edema (acumulación de líquido).
  7. Dormir con los pies elevados en la cama unos 15 centímetros.
  8. Reducir el sobrepeso y la obesidad.
  9. Realizar ejercicios donde se flexionen los tobillos para favorecer el bombeo muscular.
  10. Utilizar medias de compresión elástica que activan la circulación.