A sus 104 años recién cumplidos Dª. Eladia Durán mantiene una sonrisa juvenil. Lo asegura su hijo que acompañó a su madre el día de su cumpleaños en Ballesol Teatinos.
El cariño que todo el equipo de esta residencia le profesa, se comprobó con un regalo muy especial, una pashmina de flores que lució en la celebración, un centro de flores “tan hermoso como ella” y una gran tarta que pudo degustar junto a: familiares, amigos, residentes y profesionales de Ballesol. A todos ellos la residente más mayor de Ballesol Teatinos les regaló un consejo: “ser feliz y dar mucho cariño” para alargar la vida y la sonrisa.